jueves, 22 de diciembre de 2016

NAVIDAD MÁGICA.


UNA NAVIDAD MÁGICA.

Cuando eras niño la Navidad tenía una magia especial; hoy de alguna forma se ha convertido en una época de estrés. Pero está en tus manos recuperar, para tus hijos las personas que más amas, ese encanto que  ninguna otra temporada del año posee.

¿Te acuerdas cuando comenzaba diciembre, y con él la excitación de la temporada navideña?

¿te acuerdas con cuanto cuidado hacías tu carta para el Niño Dios, Los Reyes Magos  o Santa Claus y la amarrabas a un globo para que se perdiera entre las nubes o la depositabas en el correo o simplemente la colocabas en el arbolito.

¿Te acuerdas de esa ilusión que te causaba el poner el nacimiento y el arbolito, y como al sacar los adornos de esas cajas en las que lo guardaron el año pasado, volvías a sorprenderte con ellos, como si fuesen un tesoro recuperado?

¿Te acuerdas de la emoción que sentías cada vez que tus papás encendían las miles de luces y se convertían en un objeto maravilloso?

¿Te acuerdas cuando explorabas los  regalos, con sus hermosos papeles y sus llamativos moños, buscando una etiqueta que tuviera escrito tu nombre?

¿Te acuerdas cuando ibas con tu familia a "ver la iluminación", y tu alma se llenaba de un asombro?

¿Te acuerdas de los deliciosos olores que salían de la cocina como promesas de increíbles cosas por venir?

¿Te acuerdas de las posadas, con sus velitas, su piñata, sus canastitas de colación, sus bellas letanías y las luces de bengala? 

¿Te acuerdas cuando, en víspera de Navidad, veías con reverencia la mesa elegantemente decorada, y tu alegría cuando empezaban a llegar tus familiares?

¿Te acuerdas cuando en noche buena arrullabas al Niño Dios y lo adorabas para que te regalara una colación porque estabas celebrando su nacimiento?








Las cosas, en la actualidad, son bastante diferentes, tanto para los adultos como para los niños, pero especialmente para éstos. La celebración ha perdido su brillo, empezando porque comienzan a vendernos los adornos navideños desde septiembre, y eso provoca que ya no exista una temporada definida y especial. La excesiva comercialización  genera materialismo, y éste es veneno para la espiritualidad e  imaginación.

Con los increíbles, algunos aterradores, adelantos tecnológicos del tercer milenio, los niños vive en un mundo muy distinto al nuestro. Apegados por completo a la realidad, aun que ésta sea virtual, han extraviado mucha de la capacidad de asombro que despierta la curiosidad y, con  ella, la creatividad.

Pero, lo más importante tal vez es que han perdido la ilusión que nosotros teníamos por la Navidad. Muchos son muy pequeños y todavía cuando "se enteran de que El Niño Dios, Santa o Los Reyes Magos no es lo que ellos creían ¿Donde queda la navidad?,  ¿Dónde yace el asombro de saber que leyó su carta, y que vinieron y entraron a casa por arte de magia a dejarles sus presentes?, ¿Dónde queda esa leyenda que sustenta sueños, que alimenta ilusiones, que le da a la Navidad mucho de su carácter especial?

Pero el verdadero sentido de la Navidad es el nacimiento de Cristo, aun cuando también está cayendo un poco en segundo  plano ante la ola de materialismo una parte importante de la festividad era poner el Nacimiento completo, con su estanque de espejo lleno de patos, sus colinas con borreguitos y pastores, cascada de lluvia metálica, sus casas un portal cubierto de heno, donde la sagrada pareja aguardaba la llegada del Niño, que se colocaba en su pesebre con respeto e ilusión la noche del 24 de diciembre.





Pero todo esto no es casualidad es parte de nuestras tradiciones, de lo que somos, lo que caracteriza esas navidades llenas de colorido, y esto es un poquito de esa la historia,......


POSADAS.
Las posadas tiene relación con prácticas prehispánicas. Entre el 7 y el 26 de diciembre, los antiguos mexicas recordaban el advenimiento de Huitzilopotl. Esta coincidencia de fechas con la celebración navideña les dio a los evangelizadores un punto de partida para propagar las costumbres cristianas y arraigar la fe. Para los pueblos prehispánicos, música, baile y flores, y con estos elementos los españoles conquistaron sus almas, y el festejo  prehispánico se  transformó en un recuerdo del peregrinaje de Nazaret a Belén. Las nueve posadas representan los meses de embarazo de María, y el nacimiento el di 24 de diciembre.
En 1587, fray Diego de Soria, a quien se atribuye la celebración de la primera Posada, obtuvo autorización del Papa Sixto V para oficiar en la Nueva España unas misas llamadas  "de aguinaldo" (de aquí el nombre de otro acontecimiento) del 16 al 24 de diciembre. En estas representaban escenas de Navidad y se festejaba con luces de bengala, cohetes, piñatas y villancicos.
 La oración forma parte del ritual tradicional, aunque en la actualidad ha perdido su matiz religioso, convirtiéndose en meras ocasiones de reunión; la música religiosa y los villancicos se sustituyen por cantos populares, se disfruta de ponche de frutas de temporada y antojitos típicos mexicanos.

PIÑATA.
Aunque son originarias de China, en los territorios de México han encontrado su verdadera patria. Se dice que Marco Polo las llevó de Asia a Europa en el siglo XII, y en Italia reciben el nombre de pignata. Pronto  comenzaron a usarse en las celebraciones de Semana Santa, con significado religioso, los españoles las trajeron a nuestro país con órdenes religiosas las utilizaron como herramientas para atraer a los indígenas especialmente a los niños a la enseñanza de catecismo y la celebración de la navidad. Representando la lucha del bien contra el mal y de la fe contra la herejía.
La piñata mexicana tiene un cuerpo de barro esférico y coloridos papeles, pegados con engrudo de harina y agua. La adornan siete conos  con banderolas en sus puntas, rellena de mandarinas, tejocotes, cacahuates, colación cañas y dulces.

Los conos representa los siete pecados capitales, y la vasija de barro, el demonio que, se supone, se disfraza con seductoras máscaras, la venda con que se cubren los ojos para pegarle simboliza la fe ciega, y los dulces, las bendiciones o premios que caen sobre los fieles o las tentaciones del diablo, el palo con que se golpea simboliza al evangelio, y a Dios.







PASTORELA.
La cultura náhuatl contaba con una fuerte tradición teatral, aprovechada por los misioneros. Las primeras Pastorelas estaban escritas en la lengua nativa, pretenden transmitir el nacimiento de Jesús, la visita de los Reyes Magos y la eterna lucha del bien y el mal, corporizada por ángeles y demonios le brinda un elemento cómico.
Pronto saltaron de los atrios de las iglesias a las plazas públicas y calles, donde recogieron cantos y música tradicionales de cada región. La primera Pastorela que se representa en un escenario teatral con actores profesionales  fue  "La noche más venturosa", de José Joaquín Fernández de Lizadi, escrita en 1821, la cual dramatiza la batalla entre San Miguel y Lucifer y el tropezado camino de los pastores.Pronto saltaron de los atrios de las iglesias a las plazas públicas y calles, donde recogieron cantos y música tradicionales de cada región. La primera Pastorela que se representa en un escenario teatral con actores profesionales  fue  "La noche más venturosa", de José Joaquín Fernández de Lizadi, escrita en 1821, la cual dramatiza la batalla entre San Miguel y Lucifer y el tropezado camino de los pastores.

FLOR DE NOCHEBUENA.
Su nombre náhuatl es cuetlaxóchitl, que significa "flor que se marchita". Para los aztecas, simboliza la sangre derramada en los sacrificios al sol.
Era muy preciada por Netzahualcóyotl, no podía crecer en la capital debido a la altitud, pero a lo largo del imperio existían jardines botánicos en los que se cultivaban las plantas.
Los frailes misioneros le dieron el nombre de Nochebuena, pues la flor alcanza su maximo esplendor en invierno, y la integraron a las fiestas de Navidad. Apareció adornando las iglesias de Europa durante esta época. En 1828, Joel Robert Poinsett, embajador de Estados Unidos en México y apasionado de la botánica, visitó en temporada navideña una iglesia de Taxco. Las hermosas flores decoraban el recinto y la escena de la Natividad Poinsett se encargo de llevarla a su país y propagarla, donde pronto se adoptó como símbolo navideño.

ÁRBOL DE NAVIDAD.






Abramos el corazón a nuestros seres queridos durante esta época de reflexión gozo y  bien aventurazas. Proponte  añadir los placeres de la hospitalidad. Sé creativo con la lista de invitados varias generaciones, vecinos, amigos, etc.  Aprecia lo bueno de cada uno y recuerda el motivo de su cariño. Encuentra junto a ellos la felicidad. Comienza la fiesta con una dosis de buenos deseos . Y si la felicidad te olvida un  poco, tú nunca te olvides de ella. Declara la Navidad como época de alegría.

 Y  recuerda que el creer en una ilusión, esa magia de la Navidad ayuda a los niños a cultivar su imaginación los hace sentirse  seguros y protegidos en el núcleo de su familia, les comprueba que ellos son importantes y refuerzan su autoestima.







El mejor regalo que podemos dar a  los pequeños es devolverles ese sentimiento de asombro, esa ilusión que sólo la temporada navideña puede otorgarles. No importa si sus amiguitos en la escuela insisten en que no El Niño Dios, Santa Claus o los Reyes Magos no existen, en el fondo de su corazón saben que sí. Porque son un símbolo un ser espiritual de bondad.

Alimentar en  ellos ese mismo espíritu navideño que tus padres cultivaron en ti cuando eras pequeño es contribuir a que no pierdan esa capacidad de asombro ni de utilizar su creatividad. Es darles un sentido de pertenencia, de integridad  y unión familiar. Es conservarles, la ilusión de ser niños.

Concederles a tus hijos ese regalo maravilloso de la fe en que todo es posible. Disfruta con su alegría y deleitarte brindándoles navidades maravillosas ahora que son niños. Porque más pronto de lo que te imaginas, dejarán de serlo.

Disfrutemos estos días decembrinas. Gocemos la Navidad y el Año Nuevo con nuestra familia y amigos hagamos de esta época el tiempo más feliz.






Disfrutemos las ricas tradiciones que los mexicanos tenemos: las posadas con villancicos y piñatas; las sabrosuras de la mesa navideña; los Nacimientos, con figuras, ya humildes, ya elegantes, que nos recuerdan el misterio que celebramos estos días. Sobre todo hagamos de nuestro corazón una viviente Navidad de amor, y hagamos también de nuestro hogar un Nacimiento vivo, de modo que cada uno de nosotros sea alegría y gozo para todos.

Pero lo mas importante no olvides el principal motivo de esta celebración y recibe a ese invitado especial con la mayor alegría y gozo porque no puede haber festejo sin festejado.







 Y por ultimo te dejo esta carta que llego a mis mano hace un par de años:

Como sabrás nos  acercamos nuevamente a la fecha de mi cumpleaños, todos los años se hace una gran fiesta en mi honor y creo que este año sucederá lo mismo.

En estos días la gente hace muchas compras, hay anuncios en el radio, en la televisión y por todas partes no se habla de otra cosa, sino de lo poco que falta para que llegue el día.

 La verdad, es agradable saber, que al menos, un día al año algunas personas piensan un poco en mi.

La gente se ríe y se divierte mucho pero no saben de que se trata.
 Recuerdo el año pasado al llegar el día de mi cumpleaños, hicieron una gran fiesta en mi honor; pero sabes una cosa, ni siquiera me invitaron.

Yo era el invitado de honor y ni siquiera se acordaron de  invitarme, la fiesta era para mi y cuando  llegó el gran día me dejaron afuera, me cerraron la puerta.  ¡yo quería compartir la mesa con ellos!

 La verdad no me sorprendí, porque en los últimos años todos me cierran las puertas.
La estaban pasando en grande, para colmo llegó un viejo gordo, vestido de barba blanca y gritando; "JO JO JO JO", parecía que había bebido de mas, se dejo caer pesadamente en un sillón y todos los niños corrieron hacia él, diciendo "Santa Claus" " Santa Claus" .
¡Como si la fiesta fuera en su honor!

Llegaron las doce de la noche y todos comenzaron a abrazares, yo extendí mis brazos esperando que alguien me abrazara. ¿y saben? Nadie me abrazó.

 Comprendí entonces que yo sobraba en esa fiesta, salí sin hacer ruido, cerré la puerta y me retiré.

Me llegó  tan hondo que al pasar  por tu casa, tú y tu familia me invitaron a pasar, además me trataron como a un rey, tú familia realizaron una verdadera fiesta en la cual yo era el invitado de honor. Que DIOS bendiga a todas las familias como la tuya, yo jamás dejo de estar en ellas en ese día y todos los días.

Una vez alguien me dijo: ¿Cómo te voy a regalar algo si a ti nunca te veo? Ya te imaginarás lo que le dije; "Regala comida, ropa y ayuda a los pobres, visita a los enfermos a los que están solos y yo los contaré como si me lo hubieran hecho a  mi" cada año que pasa es peor, la gente solo piensa en las compras y los regalos y de mi ni se acuerdan.

 Voy a contarte un secreto, he pensado que como nadie  me invita a la  fiesta que han hecho, estoy pensando en  hacer mi propia fiesta, una fiesta grandiosa  como la que jamás se hubiera imaginado. Una fiesta espectacular con grandes personalidades; ABRAHAM, MOISES, EL REY DAVID Y OTROS.

Todavía estoy haciendo los últimos arreglos por lo que  quizás no sea este año. Estoy enviando muchas invitaciones y hoy querido amigo hay una invitación para ti. Solo quiero que me digas si quieres asistir y  te reservaré un lugar y escribiré tu nombre con letras de oro en mi libro de invitados.

A esta fiesta solo habrá invitados con previa reservación y se quedarán afuera los que no contestaron mi invitación.

¡ PREPÁRATE PORQUE CUANDO TODO ESTE LISTO DARE LA GRAN SORPRESA!

HASTA PRONTO
TU AMIGO.

JESUS DE NAZARETH.









QUE ESTA NAVIDAD Y AÑO NUEVO, ESTÉN LLENOS DE BENDICIONES PARA TI Y TODA TU FAMILIA.